¿Es el amar suficiente razón para estar? ¿Es el cariño eterno, que por supuesto siempre estará, excusa para seguir torturándonos?
El tiempo no fue de un día a otro. Mis decisiones, como cangreja que soy, tomaron tiempo de procesar. Creo haber hecho lo correcto, por lo menos hasta ahora.
Increpas como si la culpa no fuese de los dos; si la pena nos consume nos rasgamos... ¿Cómo es que no hemos aprendido a soportar el frío después de tantos años?