8 ago 2015

La charla de hoy me hizo darme cuenta que nadie va a entender el dolor callado que se siente -sentir que- destruir tanta alma. Se ve fácil, y lo es, pero sobrellevarlo... esa sangre en las manos, esa sangre es horrible.
"¿Quién más me va a aguantar estas cosas? Y más que eso, ¿Quién me seguiría amando así, en esa paz? ¿Quién seguiría teniendo fe en mí, esa fe que se demuestra al seguir atreviéndose a quererme? A... tratar..."