Lamento, de fondo.
Rasguñan la ventana.
Nosotros, sentados.
Estamos acostumbrados.
Le dejamos entrar.
Se refriega la espalda, feliz.
Empieza a oler mal.
El ciclo comienza de nuevo.
Duerme con pena.
Nadie sabe que tiene ansiedad.
Nadie sabe cuánto nos quiere.
Llora.
Muere.
Lloramos.
Le enterramos,
y le ponemos flores.